Por primera vez en estos tres años, tanto Lewis Hamilton como Fernando Alonso no han formado parte de la ronda definitiva en la calificación de hoy. De hecho, Lewis ni siquiera ha rodado en la Q2. Aunque fuera esperado, este resultado no deja de ser frustrante: McLaren tiene mucho trabajo por delante si quiere sacar algo de provecho del más bonito que efectivo MP4/24. Si hablamos de decepción en McLaren, se nos acaban los calificativos para Renault.
Y es que Fernando partirá duodécimo* mañana. Dicha posición no debería ser tan negativa como parece sobre el papel, ya que la libertad para elegir la carga de combustible inicial compensa los beneficios que hubiera tenido Fernando si hubiera entrado en la última fase (donde difícilmente habría podido evitar la última plaza). Sin embargo, las sensaciones del R29 son bastante negativas ya que el monoplaza es tan inestable como el que más lo cual dará muchos problemas a Alonso en carrera, como ya hemos visto hoy en cuanto Fernando ha buscado los limites. Tal y como pasaba al inicio de 2008.
Otro que debería estar condenado a dejar la F1 después de realizar su enésimo ridículo en la categoría es Nelsinho Piquet. Es incomprensible que Renault invierta un minuto más en un piloto incapaz de calificar más allá de seis u ocho posiciones de su compañero. Si a eso le sumamos su nulidad en carrera -que mañana acabe fuera de carrera por error propio es apuesta segura- y su más que discreto aporte técnico al equipo, es increíble que Piquet siga en Renault... ¿acaso no hay alguien mejor esperando su oportunidad?
La situación chirría más tras asistir a una nueva exhibición de Sebastian Vettel que, cargas de combustible aparte, se ha mezclado entre los equipos punteros en Melbourne -los del 'difusorgate'-, algo que no han podido hacer ni siquiera los pilotos de Ferrari en una sesión que ha estado marcada por la igualdad: cuatro décimas separan a Vettel del colista de la Q3, su compañero en Red Bull, que siguen demostrando a Renault como sacar partido de su motor. Correctos en calificación, Massa, Kubica y Kimi correrán mañana para obtener los máximos puntos posibles, lo cual no está nada mal viendo el panorama de sus rivales.
Y es que Fernando partirá duodécimo* mañana. Dicha posición no debería ser tan negativa como parece sobre el papel, ya que la libertad para elegir la carga de combustible inicial compensa los beneficios que hubiera tenido Fernando si hubiera entrado en la última fase (donde difícilmente habría podido evitar la última plaza). Sin embargo, las sensaciones del R29 son bastante negativas ya que el monoplaza es tan inestable como el que más lo cual dará muchos problemas a Alonso en carrera, como ya hemos visto hoy en cuanto Fernando ha buscado los limites. Tal y como pasaba al inicio de 2008.
Otro que debería estar condenado a dejar la F1 después de realizar su enésimo ridículo en la categoría es Nelsinho Piquet. Es incomprensible que Renault invierta un minuto más en un piloto incapaz de calificar más allá de seis u ocho posiciones de su compañero. Si a eso le sumamos su nulidad en carrera -que mañana acabe fuera de carrera por error propio es apuesta segura- y su más que discreto aporte técnico al equipo, es increíble que Piquet siga en Renault... ¿acaso no hay alguien mejor esperando su oportunidad?
La situación chirría más tras asistir a una nueva exhibición de Sebastian Vettel que, cargas de combustible aparte, se ha mezclado entre los equipos punteros en Melbourne -los del 'difusorgate'-, algo que no han podido hacer ni siquiera los pilotos de Ferrari en una sesión que ha estado marcada por la igualdad: cuatro décimas separan a Vettel del colista de la Q3, su compañero en Red Bull, que siguen demostrando a Renault como sacar partido de su motor. Correctos en calificación, Massa, Kubica y Kimi correrán mañana para obtener los máximos puntos posibles, lo cual no está nada mal viendo el panorama de sus rivales.
* Décimo y subiendo... hay reclamaciones pendientes contra Red Bull y Ferrari. Toyota ya ha sido sancionada.
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