miércoles, 15 de diciembre de 2010

El momento de la década: Hamilton gana el título en la última vuelta en Brasil 2008



Probablemente el adelantamiento de Lewis Hamilton a Timo Glock en Brasil 2008 haya sido uno de los más fáciles que ha realizado el británico en toda su carrera. El de Toyota acertó continuando con neumáticos lisos sobre el piso mojado ya que ganó una posición en las últimas vueltas, pero esa decisión le hizo presa fácil para Lewis, que veía el campeonato se le esfumaba de sus manos por segunda vez consecutiva cuando Felipe Massa, impecable en la última carrera en Brasil, se hacía con la victoria.

Fue fácil señalar a Glock como el culpable de que Hamilton se hiciera con el campeonato, pero lo cierto es que su irremediablemente lento paso por la última curva de la última vuelta de la última cita del campeonato sirvió como acto final de lo que había sido una de las carreras con más tensión que se recuerden. Hamilton lo adelantó y se hizo con el campeonato. Su cara de alivio tras la carrera evidenciaba que aquello que acaba de pasar no estaba en el guión de nadie por mucho que Martin Whitmarsh asegurara después estar seguro de que Lewis iba a pasar a Glock.
"Ha sido la carrera más dramática de mi vida"
Lewis Hamilton.

Esa misma tensión brilló por su ausencia en la temporada 2004, cuyo momento más destacado fue la consecución del séptimo título de Michael Schumacher. El día en que el Kaiser ascendió a su estado definitivo de piloto más laureado de todos aquellos que alguna vez se hayan puesto delante de un semáforo de cinco luces. El alemán, en el Gran Premio número 700 de Ferrari y a falta de cuatro para el final de la temporada, aseguró su victoria terminando en segunda posición en Spa. La carrera, en la que Montoya le infringió uno de los mejores adelantamientos de la década, no fue nada fácil por mucho que el dominio de Ferrari así lo hiciera parecer.

Otro de los momentos más míticos de la última década fue el abandono de Lewis Hamilton en el Gran Premio de China 2007, o mejor dicho, el momento 'sanganchao'. El inglés cometió un error de infantil marchándose a la puzolana cuando enfilaba el carril de boxes terminando con gran parte de su colchón en el liderato de un campeonato que terminaría ganando Kimi Räikkönen. La rotura de motor de Michael Schumacher en Suzuka dejando vía libre a Fernando Alonso de cara a la victoria en 2006 contrasta con la estrategia de Ferrari en el reciente Gran Premio de Abu Dabi de 2010, o lo que es lo mismo, la victoria de Sebastian Vettel en el Mundial que ha cerrado la década.

lunes, 13 de diciembre de 2010

El año de la década: 2010



2010 ha sido el año de la década. Seis pilotos han liderado el campeonato y cuatro de ellos alargaron su pelea hasta el último Gran Premio del año. Cada uno con sus muchas virtudes y los defectos justos para demostrar que detrás de esos cascos se ocultan personas tan mortales como tú o como yo. Un joven enamorado de los Beatles, que disfruta como un enano viendo los viejos sketches de Monty Python y desborda carisma y talento por allá por donde va se llevó la gloria, pero bien podrían haber sido el antiguo rey español, el esforzado australiano o el prodigio británico quienes consiguieran la corona. Hubiera sido justo en cualquier caso.

La temporada que acaba de finalizar ha sido una bendición para la Fórmula Uno. La tensión desde los primeros compases del campeonato ha tenido a los aficionados pegados al televisor y desde la victoria de Alonso en Bahrein hasta el triunfo de Vettel en Abu Dabi, la lucha por el título ha tenido más altibajos que la Fórmula Rossa del Ferrari World. Red Bull quiso dar más emoción al campeonato de la que quiso tenerla, McLaren no supo dar el último paso para asaltar a los líderes y Ferrari apenas pudo aguantar el ritmo a pesar de contar con un imparable Alonso a final de temporada.
"Se lo pronostico: Vettel será el próximo campeón del mundo"
Bernie Ecclestone, en diciembre de 2009.

La lucha cerrada entre los dos pilotos más laureados de la década en 2006 también permanecerá en la historia. Tan distintos y tan iguales en rendimiento, Fernando y Michael nos ofrecieron un campeonato de aúpa. El asturiano comenzó a defender su título con seis victorias y tres segundos puestos en las nueve primeras carreras. La presión del siete veces campeón hizo que Alonso sólo pudiera ganar en Japón en la segunda parte del año, logrando una distancia suficiente para hacerse el campeonato en la última carrera en Brasil.

El cambio de papeles en Imola donde Schumacher devolvió a Alonso la jugada sufrida en 2005, el aparcamiento del alemán en la Rascasse, el aumento de rendimiento de los Bridgestone con calor, la doble sanción en Hungría que terminó en la épica carrera con Alonso eliminado por la dichosa tuerca y Schumacher, incapaz de contener a un desatado De la Rosa, la lucha en la curva 8 de Estambul, la última victoria de Michael en Monza antes de anunciar su retirada, el desastre de Renault en China, la rotura de motor del alemán en Suzuka y la victoria final de Alonso con el Kaiser remontando en Brasil son las imágenes de un año inolvidable.

Precisamente, la tiranía de Schumacher en 2002 firmando un campeonato completo en las dos primeras posiciones en cada carrera -con excepción de Malasia donde terminó... ¡tercero!- cierra el podio de las mejores temporadas de la década. La pelea entre Lewis Hamilton y Felipe Massa en 2008 y la apasionante temporada 2003 en la que hasta ocho pilotos lograron la victoria también merecen una mención.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Debutante de la década: Lewis Hamilton, 2007


2006. Istanbul Park. GP2. Aquella remontada de Lewis Hamilton fue el preludio de la irrupción del mejor debutante de la historia de la Fórmula Uno y seguramente, el primer recuerdo que muchos aficionados tendrán del inglés cuando lo recuerden pasados los años. Esa actuación define a Lewis Hamilton en su estado más puro: talento, agresividad e impulsividad a partes iguales para un piloto que si no existiera, alguien debería inventarlo. Después de todo, y pese a los enemigos ganados en estos años por méritos propios y ajenos, no hay nadie en su sano juicio que niegue que Lewis se convirtió de entrada en un grande de la Fórmula Uno.

Para el público en general todo comenzó en 2007, cuando McLaren apostó por el inglés como compañero de Alonso. Sin la presión de tener que rendir ante una comparación desigual, Lewis podría desarrollarse sin problemas. Sin embargo, ya en la primera carrera,el jovenzuelo adelantó a Alonso en la salida demostrando lo que iba a venir e iniciando una racha de nueve podios consecutivos para empezar. Sin embargo, la actitud del inglés, secundada por su equipo deseoso de convertir a Lewis en campeón en su primer intento, sometió a una presión exagerada a sus pilotos y convirtió en el ambiente insostenible. En esas circunstancias, Hamilton se puso el traje de terreste y dilapidó su ventaja en el campeonato en las dos últimas carreras.
"La mejor sensación es siempre cuando sabes que has ganado y has batido a alguien tan talentoso como él (Alonso), dentro del mismo equipo, con el mismo material y las mismas oportunidades"
Lewis Hamilton.

La historia de Juan Pablo Montoya y Williams es una extraña historia de amor que terminó saliendo mal. El colombiano, leyenda en Estados Unidos al ganar en su primer intento en Indianapolis, se enroló en el equipo inglés después de competir en la F3000. A pesar de que su primer año estuvo marcado por la inconsistencia, Juan Pablo ya demostró sus ganas de convertirse en alguien grande en el Gran Circo desafiando de igual a igual a Michael Schumacher en Brasil, pero no sería hasta el Gran Premio de Italia cuando el piloto bogotano se haría con su primera victoria en la máxima. La renta de Montoya, que jamás terminó encajando en la compleja Fórmula Uno, ascendió a siete triunfos, los tres últimos con McLaren.

Como no podía ser de otro modo, la llegada del campeón más joven de la historia cierra el podio de mejores debutantes de la historia. Después de debutar en los puntos con BMW en el Gran Premio de Estados Unidos 2007 al tiempo que arrasaba en las World Series, Vettel se unió a Toro Rosso para disputar las siete últimas carreras del año, saltando por primera vez a las primeras páginas con una impactante cuarta posición en China. También su actual compañero Mark Webber, quinto en su debut con Minardi en 2002 y Kamui Kobayashi, que se ganó un asiento a tiempo completo con sus actuaciones a final de 2009 se han ganado una mención en esta categoría.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

La decepción de la década: Indianapolis 2005


En plena lucha por el campeonato en 2005, el Gran Circo se desplazó a Indianapolis, pero durante el fin de semana, dos accidentes de en la sección del óvalo que atraviesa el circuito hicieron a los equipos comenzar a albergar muchas dudas sobre la posibilidad de que los neumáticos Michelín sólo soportasen el paso por dicha curva en un número escaso de ocasiones. La inspección realizada por el sello galo confirmó que las gomas no aguantarían una carrera usual y aunque la calificación se disputó sin problemas, los equipos y la FIA no fueron capaces de encontrar el consenso para aceptar alguna de todas las soluciones propuestas para solventar el embrollo.

Así que, una vez completada la vuelta de formación, los coches equipados con neumáticos Michelin enfilaron el pitlane dando pie el momento más lamentable de la última década de competición precisamente en el lugar en que la Fórmula Uno más necesitaba dar un buen espectáculo. Los aficionados se indignaron, Monteiro subió al podio acompañando a los pilotos de Ferrari en su única victoria del año, la polémica entre los equipos se acrecentó ("Hay que darle las gracias a Ferrari por pensar en la seguridad de los demás" fue la perla que soltó Fernando Alonso) y la Fórmula Uno sólo volvió en dos ocasiones más a Indianapolis. La guerra de neumáticos terminó aún antes ya que en 2007, Michelin ya estaba fuera de la Fórmula Uno.
"Yo no pongo en riesgo la vida de mis pilotos."
Flavio Briatore.

Muchos más matices si cabe presentó el desastre de McLaren en 2007. Fernando Alonso llegaba al equipo de sus sueños como bicampeón del mundo y la intención de dar comienzo a una era gloriosa en un equipo que necesitaba volver a ganar. Como compañero, McLaren permitió a Lewis Hamilton dar el salto a la Fórmula Uno. El inglés había maravillado a todos aquellos que se preocuparon por echar un ojo a sus carreras en la GP2 en 2006 y su carrera había sido tutelada por el equipo desde niño. Debutante y campeón: parecía una alineación perfecta.

Pero Hamilton rindió desde el primer día al 110% y pronto comenzó a hacer pensar al equipo que el sueño de ver a su joven pupilo ganando el Mundial era posible. El inglés se creció cuando el equipo le apoyó en un absurdo mosqueo en Mónaco y Alonso comenzó a sentirse algo más que incomodo cuando su compañero fue imbatible en la gira americana, pero la situación límite llegó en durante la calificación de Hungría cuando el equipo instigó una investigación contra su propio piloto motivando que la situación de Alonso pasara del sueño a la pesadilla en apenas unos meses. El resto es historia: Hamilton mostró su cara de debutante en las últimas carreras y Alonso se marchó del equipo mientras que eran Räikkönen y Ferrari quienes saboreaban el champagne.

La marcha de varios fabricantes también fueron noticias decepcionantes durante estos años: Toyota se marchó tras años de invertir más que ningún otro, Honda se fue sin aprovechar un coche ganador y BMW rompió con Williams dejando en el ambiente la sensación de que su unión pudo haber sido mucho más grande de lo que fue. En el camino también se quedó Jaguar, más por desidia de la dirección de Ford que por el fracaso deportivo de su programa.

Otro de los aspectos por los que se ha marcado la década ha sido la expansión del calendario por todo el mundo: Bahrein, Singapur, Corea, Abu Dabi y la inclusión de carreras nocturnas o durante el anochecer... que, desgraciadamente, en algunos casos comprometieron los aspectos deportivos: el Gran Premio de Malasia 2009 fue suspendido y el estreno del circuito de Corea terminó sin luz.

lunes, 6 de diciembre de 2010

El outsider de la década: Sebastian Vettel gana con Toro Rosso en Italia 2008


El año 2008 no había empezado bien para el joven Sebastian Vettel y Toro Rosso, pero su destacable sexto puesto en el estreno del Valencia Street Circuit y el quinto en la extraordinaria carrera de Spa hacía que la competencia comenzara a ver al equipo de Faenza como un posible juez del título que se jugaban Lewis Hamilton y Felipe Massa. Pero nadie esperaba lo que pasó en Monza cuando Vettel fue el más listo (y el más rápido) en una calificación pasada por agua en la que Bourdais, cuarto, se encargó de confirmar el potencial de Toro Rosso en casa.

En carrera, cualquier cosa podría salirle mal a Seb. Se le podría haber calado el coche (como le pasó al cuatro veces campeón de la Champ). Podría haber trompeado como Webber. Podría haberse tocado como Coulthard, pero, como otras tantas veces, ese endiablado alemán lo hizo perfecto desde que se apagó el semáforo convirtiéndose en el ganador más joven de la historia con tan sólo 21 años arrebatando el récord a un tal Fernando Alonso. Aunque muchos seguían sin dar crédito a lo ocurrido, había ganado Toro Rosso. ¡Había ganado Minardi! ¡En Monza!
"A veces me preguntaba si era posible que estuviera primero. Esto es mucho más grande de lo que cualquiera pudiera imaginar."
Sebastian Vettel.

Seis años antes, a Minardi le quedaba mucho para ser Toro Rosso y apenas agonizaba en el fondo de la parrilla tras haber sido vendido a Paul Stoddart, un empresario australiano con más talento para dar titulares a la prensa que capacidad de sacar un equipo de Fórmula Uno adelante. Sin embargo, la primera carrera de ese 2002 será eternamente por la actuación de un debutante llamado Mark Webber terminó en quinta posición.

Cierto es que ocho coches quedaron eliminados en la primera vuelta en Melbourne tras el incidente entre Ralf Schumacher y Rubens Barrichello, pero Webber supo ser inteligente y evitar los problemas en unas circunstancias en las que pilotos expertos terminaron fuera de pista. Lo hizo para alegría de muchos aficionados en el circuito y millones de personas en el mundo. Pocas veces se ve a un piloto subir al podio sin quedar entre los tres primeros, pero en esta ocasión el reconocimiento estaba más que merecido.

En el recuerdo queda también la genial victoria de Giancarlo Fisichella con Jordan en Brasil 2003 en un Gran Premio con los finales más sorprendentes de la historia en el que nadie ocupó el lugar correcto en el podio. Fisichella compareció como segundo tras Räikkönen mientras que Alonso, tercero, no subió al cajón al haberse estrellado en el accidente que paró la carrera. Quince días después, el italiano recibió su trofeo al revelarse que la clasificación que valía era la de una vuelta anterior.

Giancarlo también es protagonista del momento 'outsider' más reciente de los elegidos con su pole position con Force India en el penúltimo Gran Premio de Bélgica. Sólo el KERS del Ferrari de Räikkönen le impidió convertir esa victoria en algo más... que un contrato con la Scuderia. Para terminar, hay que recordar a Markus Winkelhock. ¿No lo conocen? Es el único piloto que ha liderado todos los Grandes Premios que ha disputado. En concreto, uno: el GP de Europa 2007. Aunque no terminó aquella carrera, el alemán es uno de esos personajes que siempre serán recordados por los aficionados. Ahora mismo corre con Audi en el DTM.

viernes, 3 de diciembre de 2010

El adelantamiento de la década: Alonso a Schumacher en Japón 2005


Hay momentos en los que un piloto supera sus límites. El adelantamiento de Alonso a Michael Schumacher en Japón 2005 fue uno de esos momentos. El asturiano, que se había quedado atrás en la calificación remontaba camino del podio tras tener que devolver la posición a Christian Klien un par de vueltas después de saltarse la chicane al adelantarle (según la FIA...) y veía como Kimi Räikkönen, su rival por el título, cabalgaba hacia una de las mejores victorias de su carrera cuando se encontró tras el alerón del Ferrari de Michael Schumacher.

Y la 130R, a unos 270 km/h, fue el lugar elegido para culminar el adelantamiento sobre el piloto más laureado de la historia. Las simulaciones aseguran que un toque a esa velocidad hubiera sido fatal para Alonso que no vaciló ante Schumacher, alguien que no había dudado en mandar al muro a sus rivales en los noventa (¡y en 2010!). Tras terminar la carrera, el alemán dijo que no tuvo nada que hacer ante la velocidad del Renault. Sin embargo, su cara aún reflejaba el asombro del adelantamiento que había sufrido tan sólo unos minutos antes.

"Saliendo tan atrás era impensable acabar tercero, pero el coche ha sido muy bueno y se comportaba a las mil maravillas."
Fernando Alonso.
Otro de los grandes protagonistas de los adelantamientos de la década ha sido Juan Pablo Montoya, que se encargó de demostrar sus credenciales después de acumular experiencia en el noble arte de rebasar al rival precedente en sus años en Estados Unidos. El colombiano, en su tercera participación en Fórmula Uno, no se cortó al lanzar su Williams por el carril interior en la Curva 1 de Interlagos, lugar dónde jamás le hubiese esperado Michael Schumacher, que terminó con su Ferrari en la hierba. Sin embargo, no sería hasta tres años más cuando Montoya culminara su movimiento maestro sobre el Kaiser adelantándolo en la antigua Bus Stop en el Gran Premio de Bélgica 2004 en una acción que parece desafiar las leyes de la física.

Pero el alemán no ha sido tan sólo la víctima preferida de los aficionados, ya que su adelantamiento de despedida en el Gran Premio de Brasil de 2006 sobre Kimi Räikkönen ha sido votado por un buen número de los encuestados, quedándose a apenas varios votos de la pasada del finlandés a Giancarlo Fisichella que le dio la victoria en la última vuelta del mencionado Gran Premio de Japón de 2005.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

El escándalo de la década: El 'crashgate'


Tres nombres: Nelson Piquet Jr, Flavio Briatore y Pat Symonds fueron los principales protagonistas del mayor escándalo de la década, el accidente a propósito del brasileño para favorecer las opciones de su compañero Fernando Alonso en el Gran Premio de Singapur 2008. Aunque el conocido como Crashgate da para una apasionante novela, el resumen más simple habla del acto más bochornoso que hemos vivido en años de Fórmula Uno, pero tan bien contado que nadie creyó la historia que un periodista tan grande como Jonathan Noble fue capaz de ir desentrañando basándose en las confesiones de Mister X, el personaje anónimo que levantó las alfombras desde dentro de la propia escudería Renault.

El 'crashgate' es una de esas historias de tal magnitud que jamás conoceremos toda la verdad. Lo único cierto es que dañó la imagen del deporte en uno de los momentos dejándola en niveles paupérrimos. Los sponsors abandonaron al equipo, Nelsinho jamás volverá a pilotar un Fórmula Uno, la imagen de Flavio Briatore quedará manchada para siempre y Pat Symonds invierte su tiempo en juntar palabras en una redacción en lugar de hacer cálculos estratégicos. Al menos, Renault libró la sanción y parece haber olvidado el asunto, tan sólo un año más tarde, con la entrada de Genii Capital y Eric Boullier en la dirección.
"Ese accidente no está bien, ha pasado porque tú querías que pasara."
Felipe Massa, tras la carrera a Flavio Briatore.

Menos elaborado fue el modus operandi del segundo escándalo de la década, la trama de espionaje entre McLaren y Ferrari en 2007. No nos engañemos, pero la señora Coughlan y el empleado de la imprenta que destapó el suceso cuando se encontró con planos confidenciales directos desde la fábrica de Maranello no serían dignos ni de la peor película de la saga Bond. Sin embargo, las consecuencias no tuvieron nada de gracioso para McLaren (100 millones de dólares y la exclusión del campeonato de constructores) y mucho menos para Nigel Stepney, el polizón de Ferrari, sentenciado a veinte meses de prisión en Italia, aunque es poco probable que termine con sus huesos en la carcel.

Menos valorada ha sido la bochornosa actuación de Michael Schumacher en la calificación del Gran Premio de Mónaco 2006 cuando paró su monoplaza en medio de la pista para asegurarse la pole position, la publicación del no menos bochornoso vídeo de Max Mosley en el que mostraba sus aficiones sadomasoquístas con unas señoritas vestidas con uniformes de las SS o la conocida orden de equipo de Ferrari a Rubens Barrichello en el Gran Premio de Austria 2002.

sábado, 27 de noviembre de 2010

Razones por las que estar contentos

A buen seguro que gran parte de los lectores de este blog siguen recuperándose de lo ocurrido en el pasado Gran Premio de Abu Dabi donde Fernando Alonso se quedó con la miel en los labios y no pudo conseguir el título en su primer año con Ferrari. Sin embargo, una visión más global de la temporada debería mitigar esa sensación de descontento.

COMPETITIVIDAD
El campeonato ha sido el más competido en años. Hemos tenido seis pilotos distintos liderando el campeonato, cuatro en lucha por el título hasta la última carrera y pilotos de equipos como Williams, Renault y Mercedes luchando con los mejores durante algunas fases de los Grandes Premios. Es por eso que, a pesar de que el dominio de Red Bull en calificación pueda dar otra sensación, estamos hablando de la parte alta de la parrilla más igualada en bastantes años.

ALTERNATIVAS
Lo más apasionante de esta pelea es lo diferentes que son los equipos. Red Bull tiene una visión mercantil de la Fórmula Uno inédita hasta ahora en la que encaja Sebastian Vettel, pero no tanto Mark Webber, un veterano curtido en mil batallas que espera salir vencedor en las últimas que disputará. Mientras, Fernando Alonso se esfuerza en contagiar su espíritu ganador a un Ferrari venido a menos tras el final de su gran era y McLaren sigue puliendo ese diamante llamado Lewis Hamilton y aprovechándose de un gran piloto como Jenson Button. Cualquiera de los cinco hubiera sido un gran campeón y es perfectamente comprensible que los amantes del motor sean capaces de identificarse con uno de ellos. Ante tanta diversidad, para gustos, colores.

TALENTO EN LA PARTE MEDIA
El arcoiris de talento no termina en la parte alta, ya que tipos como Robert Kubica y Nico Rosberg merecen un puesto en esa paleta de colores. Ambos han bregado con coches inferiores sacandoles un rendimiento espectacular. Hay que destacar también a Rubens Barrichello, impulsor de la renovada Williams y espejo en el que se mira un tal Schumacher para pensar que quizá no es demasiado tarde para volver a rendir. Con pilotos como Kamui Kobayashi, Adrian Sutil o Nico Hülkenberg también en parrilla, el nivel medio de la Fórmula Uno actual -pese a los dichosos sponsors con ganas de ejercer de director técnico- es tremendo.

EQUIPOS NUEVOS
Me gustan los equipos nuevos. Hay que tener en cuenta cómo entraron en la Fórmula Uno y que las condiciones iniciales con las que presentaron candidatura estaban muy lejos de las que realmente se han producido. Sin embargo, proyectos como Lotus, sellando las bases para meter miedo a conjuntos establecidos en el futuro, demuestran que si se da confianza a la gente adecuada con los medios adecuados, un 'novato' puede convertirse en un equipo serio. Mientras tanto, los tres permiten competir a pilotos jóvenes y reivindicarse a hombres con mucha más capacidad de la que algunos les otorgan como Timo Glock o Heikki Kovalainen.

TODT
El cambio de manos en la FIA también ha sido positivo para la Fórmula Uno. En el Gran Circo sobran 'bocazas' -a pesar de que den juego a los medios- y Todt ha sabido entenderlo, echarse a un lado y trabajar en la sombra. La salida de gente como Flavio Briatore, Max Mosley o Ron Dennis en los últimos años, con todo el respeto que hay que tener a sus grandes historiales, ha destensado el ambiente cargado que se vivía en la Fórmula Uno. Bienvenidos sean hombres que se dedican a hacer su trabajo como Eric Boullier. El francés tenía el trabajo más complicado de todo el paddock y lo ha resuelto con brillantez.

SAYONARA, BRIDGESTONE
El gran 'pero' de esta temporada han sido los neumáticos. La broma de que alguien pueda correr un Gran Premio completo con neumáticos 'blandos' le ha quitado salsa a las carreras, asi que la entrada de Pirelli -a pesar de aquello de 'más vale bueno conocido que malo que conocer'- será buena para el espectáculo. Los italianos se lo han tomado en serio y da la impresión de que en pocas semanas hicieron más trabajo que Bridgestone en todo este tiempo. Tanta paz lleven como descanso dejan.

KERS Y MÁS
Soy firme defensor del KERS. Me parece un concepto que debe ser desarrollado en la Fórmula Uno, aunque parece claro que no de la manera que se reguló en 2009. La tecnología volverá en 2011, el año en que la Fórmula Uno retrocederá dos temporadas prohibiendo los dobles difusores que han lastrado los adelantamientos durante este tiempo. No esperen que la Fórmula Uno se convierta en una competición de karts. Las carreras seguirán siendo aburridas en Bahrein o Valencia, pero a buen seguro que disfrutaremos como enanos en Spa o Monza. Y es que, aunque le queramos dar muchas más vueltas, el gran lastre de la Fórmula Uno son este tipo de circuitos anodinos.

domingo, 14 de noviembre de 2010

El 2010 de Sebastian Vettel


La llegada del campeón del mundo a McLaren, el aterrizaje de Fernando Alonso a Ferrari y la vuelta de Michael Schumacher hicieron que pocos estuvieran pendientes de Red Bull ySebastian Vettel en pretemporada.

Su 2009 fue impresionante y las bases maestras del coche que permitió al alemán comvertirse en subcampeón del mundo tras Jenson Button han sido las que han permitido a Vettel convertirse en campeón del mundo en este apasionante 2010.


El 2010 de Fernando Alonso


El 30 de septiembre de 2009 se terminó uno de los culebrones más largos de los últimos años,el cantado fichaje de Fernando Alonso por la escudería Ferrari. Atrás quedaban centenares de rumores, declaraciones y sobre todo, el desastre de la estancia del asturiano enMcLaren y su difícil segunda época en Renault.

A pesar de su aparición estelar en la reunión anual del equipo en Cheste, la concentración invernal de Madonna di Campiglio fue el lugar dónde comenzó oficialmente la historia que terminaría desembocando diez meses más tarde en una lucha cerrada con Red Bull por el tercer título del asturiano.


Encuesta: Lo mejor de la década

sábado, 13 de noviembre de 2010

La importancia de perseguir los sueños

Aquí está el pequeño Mark. Nueve años en Fórmula Uno y 23 después de tomarse esta fotografía en su país natal, este niño podría convertirse este domingo en campeón del mundo de Fórmula Uno tras sobrevivir durante años al estigma de ser uno de los pilotos que más carreras había disputado sin lograr una victoria.

Gane o pierda, este trabajador australiano habrá demostrado lo importante de perseguir y luchar por nuestros sueños como otros grandes de la historia de muchos deportes han hecho durante décadas sirviendo de inspiración para las masas.

A los mortales sólo nos queda aplicar esa filosofía a nuestro día a día y ver desde nuestro sillón, con más o menos apego, como estos héroes convierten su sueño en realidad. O, si nos apetece, emularlos ahora que la tecnología y la creatividad nos dan herramientas para ello.

En eso consiste el proyecto Raise up the 10th, que permite a cualquiera luchar por convertirnos ante la pantalla en un futbolista profesional y de paso, conseguir viajes para ver cómo nuestros ídolos convierten sus sueños -nuestros sueños- en realidad. La confirmación de esta ambición es que más de 12.000 personas ya están luchando por ser los mejores. Si lo consiguen, podrán tener el privilegio de ver cómo sus héroes luchan por sus sueños.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Fernando Alonso no es rival para Red Bull


"Mi trabajo es ganar el campeonato del mundo, mi trabajo no es que la gente me quiera y me abrace," solía decir un famoso jefe de equipo, cuya línea editorial parece muy alejada de la marcada por Dietrich Mateschitz, que ha asegurado que preferirá perder el campeonato de pilotos a ganarlo por dar una orden de equipo.

Cualquiera que conozca la historia del hombre que casualmente descubrió una bebida que causaba furor en Hong Kong sabe que la visión empresarial de Red Bull pasa por el marketing y la consolidación de una imagen fresca y rompedora dirigida a jóvenes que apenas sabrían enumerar los componentes del jarabe.


domingo, 7 de noviembre de 2010

¿Nadie quiere patrocinar a este chico?


No estaba extrañado. Acababa de dar a su escudería su primera pole en cinco años en su primera temporada en el Gran Circo metiendo nada menos que un segundo al resto y quedándose a siete décimas de su mejor tiempo del fin de semana en unas condiciones en las que otros pilotos no pudieron mantener el coche en el asfalto y los que lo hicieron se quedaron a casi cuatro segundos de sus tiempos.

Está acostumbrado. Hacer la pole, descorchar esa botella de champán al día siguiente y aparecer en los titulares han sido su oficio desde que se puso delante de un volante. Para los ajenos a las categorías inferiores, puede ser un don nadie, pero un simple vistazo a su historial demuestra la pasta de la que esta hecha el alemán más acertado del día en calificación.


sábado, 6 de noviembre de 2010

¿Y tú por qué eres de Williams?

Toda la vida. Escuchando la misma pregunta... como si fuera el anuncio de "papá, ¿por qué somos del Atleti?" en bucle continuo. Sin duda, lo de Nico, nuestro Nico, en Brasil hará que algunos empiecen a comprender el por qué de ser fiel a unos colores durante tantos años, a pesar de que el viento no suela venir de cara casi nunca. Eso hace que cuando sopla a favor, se disfrute mucho más. Tardes como las de hoy, hacen cierto aquello de "la vida puede ser maravillosa".

Mi primer recuerdo es ver al mejor piloto caer en acto de servicio al volante de uno de esos coches, por entonces no levantaba un metro del suelo y madrugaba para animar a Damon Hill para después pasarme la mañana tratando de ganar a ese tal Schumacher en el scalextric, con pista o sin ella. Bastantes años más tarde de aquel día en el que muchos celebramos como a aquel tipo le salía mal su jugarreta en Jerez, mi afición por ver las carreras se convirtió en poner el teletexto para ver si Montoya había convertido -de una vez- una pole en victoria en el año del apagón, tanto deportivo como televisivo, de 2002.

A pesar de un año más tarde llegó la revolución, seguía teniendo esa mirada para los coches blanquiazules. Me enfadé con Juan Pablo en Indianapolis, pensé que el morro de morsa era la mejor idea que se podía tener, me ilusioné con la llegada de Webber y estaba más pendiente del segundo que del primero cuando Alonso ganó en Singapur 2008. Hoy, después de tanto tiempo, he vuelto a disfrutar con un coche made in Grove.

Sinceramente, esta pole no servirá para mucho en lo deportivo pero creo que sí que será útil para que el equipo pueda seguir atrayendo sponsors y que pueda retener a los dos pilotos que también lo están haciendo. Aunque, sin duda, lo más importante es que en algún lugar del mundo habrá un niño que haya tenido su primer contacto con la Fórmula Uno viendo a un chaval de blanco y azul dando una lección a la competencia.

viernes, 5 de noviembre de 2010

La olla a máxima presión


El circuito de Interlagos será el penúltimo juez del campeonato del mundo, aunque podría ser el que dicte sentencia si tenemos en cuenta que Fernando Alonso, dadas ciertas condiciones especiales, podría convertirse en triple campeón del mundo este domingo.

Este tobogán situado a las afueras de Sao Paulo es un circuito duro para los pilotos, que año a año son juzgados por su precisión en la S de Senna. La larga subida hacia los boxes prueba a los motores, que tendrán una importancia capital en este Gran Premio. El final se acerca y nadie puede permitirse más fallos.


jueves, 28 de octubre de 2010

¿Williams abre la horquilla?

Es complicado dejar de valorar la información de la prensa alemana en la que se asegura que Williams podría dejar fuera a Rubens Barrichello para dar entrada a Pastor Maldonado, manteniendo al niño de sus ojos Nico Hülkenberg dentro de la escudería. Lo que es seguro es que en este juego de tres el que más cerca parece de confirmar su asiento es el venezolano, el único que tiene el dinero suficiente para asegurar el futuro de la escudería, siempre apurada en ese aspecto.

La temporada de Rubens ha sido sobresaliente. Llegó con una sonrisa de oreja a oreja a pesar de cómo terminó su aventura en Brawn, ha orientado al equipo en aspectos en los que otros pilotos no habían sido capaces en años anteriores y ha rendido en pista como si tuviera 25 años. Con la limitación de entrenamientos, la importancia de tener a alguien tan experto como el brasileño es capital. De hecho, hay más de un equipo que se debe estar arrepintiendo de su elección para 2011 y el rumbo que tomará Sauber con Kamui y 'Checo' Pérez será una vara para saber cuán importante es tener un piloto experto en el equipo.

Así pues, la opción lógica sería desprenderse de Hülkenberg, alguien que no ha prendido fuego a la Fórmula Uno en su primer año. Pese a ello, su temporada ha sido de menos y más demostrando que su historial en las fórmulas de promoción son algo más que meros números en una lista. Sin ir más lejos, la visión desde dentro del equipo que se tiene de Hulk es 'nuestro Hamilton' y no se tiene ninguna duda de que el alemán se convertirá en uno de esos pilotos que sacan el 110% de los coches que pilotan a no mucho tardar. Para Williams, sería tremendamente duro ver cómo lo consigue en la competencia.

La elección deja a Williams entre la espada y la pared al tener que prescindir de uno de sus pilotos cuando ambos han satisfecho las expectativas en 2010. Mientras que Maldonado -piloto tan rápido como temerario- sigue a la espera con ese gran fajo de billetes que nos permitirá seguir viendo el nombre de Williams en la F1, el resto de equipos con algún asiento disponible están pendientes de quién es el 'cortado' para comenzar a mover las fichas del domino.

lunes, 25 de octubre de 2010

27 vueltas y un sueño que se esfuma


Sebastian Vettel fue virtual líder del campeonato durante exactamente la mitad del Gran Premio de Corea, el tiempo que trascurrió desde los dos grandes giros de guión de la carrera: el error de Mark Webber que terminó con las ilusiones del australiano estrelladas en las barreras y la rotura de su octavo motor Renault de la temporada.

Durante esos minutos, el sueño de hacerse con el título parecía tan cerca como había estado en otras ocasiones que terminaron de la misma manera. Con problemas mecánicos (Bahrein o Australia,..) o fallos de pilotaje (Turquía o Bélgica). Tal es así que Vettel es el único de los seis primeros que nunca ha liderado el Mundial en la presente temporada.


jueves, 21 de octubre de 2010

¿De verdad, Fernando?

No estoy de acuerdo con lo que ha dicho Fernando Alonso. Su 2010 dista mucho de ser su mejor temporada en Fórmula Uno. Sin dar muchas vueltas, se me vienen a la cabeza aquel lejano 2003 donde comenzó todo, el impecable 2005 en el que la combinación Michelín-Alonso-Renault nos hizo ver a un piloto que rozaba la perfección o el peleado título de 2006. Todos me resultan años mejores del asturiano, que este año ha estado por debajo de su nivel en más de una ocasión que tampoco es necesario recordar.

Desde Maranello se empeñan en resaltar que Alonso está contento y disfrutando de la experiencia Ferrari. No es necesario que lo hagan porque está claro que, una vez pasada la fase de integración, la relación va viento en popa. El futuro, dejando a un lado lo que pase en Abu Dhabi, será brillante pero la realidad es que, hoy, Alonso tiene difícil hacerse con el título, condición sine qua non para poder equiparar su 2010 a los nunca suficientemente valorados títulos obtenidos en la era Renault.

Centrándonos en la lucha por el título, noto relajado a Fernando. Casi como ese hermano mayor que te deja empezar ganando, parece encantado de las cartas que le han tocado en las tres manos que decidirán la partida. Sin sonrisas nerviosas como Webber o Vettel ni la cara de 'el Mundial se me escapa' que tiene Hamilton desde que abandonó en Monza. Dispuesto a tirar de juego psicológico y experiencia con y cuando haga falta, todos saben que está preparado para que, a final de año, al menos podamos discutir si ésta ha sido la mejor temporada de su carrera.

Llega Corea: Primer 'match ball' para McLaren


Han llegado. Finalmente, el Gran Premio de Corea se disputará en el circuito de Yeongam, donde los cientos de operarios -desde meros peones hasta miembros del ejército nacional- siguen trabajando para que todo esté a punto de cara al inicio de los primeros entrenamientos libres que nos darán una idea de cómo está la pista, la gran incógnita de lo que resta de campeonato.

El circuito parece listo, pero quedan detalles por pulir: la entrada y salida de los boxes parece peligrosa, algunos pianos que necesitan algún retoque y la colocación de algunos asientos sigue pendiente. Después tocará recoger y limpiar cada rincón del circuito para la visión desde televisión se ajuste a la tecnológica e impoluta Fórmula Uno.


miércoles, 13 de octubre de 2010

Un repaso al mercado

No es momento de hablar de traspasos sino de lucha por el campeonato. Sin embargo, hace un tiempo que quería hacer un aparte para comentar los movimientos, más en la sombra que en la realidad, que se están produciendo en el mercado de pilotos.



LOS PUNTEROS, ESTABLES
En Red Bull, a pesar de todo, reina la estabilidad y no hay atisbo de búsqueda de relevo para Webber, que terminará contrato en la próxima temporada. Los jóvenes del programa de pilotos no terminan de romper la puerta, así que es posible que el equipo austriaco busque la alternativa fuera. En Ferrari tampoco hay más que hablar. Traer un piloto de primera (como Kubica) sería amenazar el liderazgo de Alonso, por lo que Massa tiene el puesto asegurado. Enrolar a Pérez en la FDA es buen movimiento con vistas al futuro. Lo mismo pasa en McLaren. Su pareja es dificilmente mejorable y después de todo, Hamilton y Button se complemente bien.

¿Qué dice la bola de cristal? No se pagará muy caro ver a los mismos seis en los tres equipos.


EL ASUNTO ALEMÁN
Michael Schumacher parece decidido a continuar, al menos un año más en Mercedes, lo que cerraría las puertas de un equipo grande, de nuevo, a Adrian Sutil, que aún mantiene la esperanza de dar el salto. Si tenemos en cuenta que Force India ha anunciado que tiene un asiento disponible (presumiblemente para Di Resta aunque no debemos olvidar a Chandhok), podría ser el italiano Vitantonio Liuzzi, a pesar de tener contrato, quien dejará el equipo de Vijay.

¿Qué dice la bola de cristal? Michael seguirá, no tiene sentido dejarlo, así que se acabó ver a Liuzzi en la F1 (dicen que es el rojo del vídeo). A Mercedes no le costará pagar su finiquito para poner a Di Resta. El bueno de Karun estaría encantado de ser el tercero de a bordo.


MURMULLOS EN LA PARTE MEDIA
Aparcado el fantasma de la vuelta de Kimi, Renault parece decidido a seguir apostando por Petrov. Después de todo, lo importante es darle un coche ganador a Kubica. Esa misma pelea debería ser la que mueva a Williams con el joven Nico Hülkenberg, pero las altas pretensiones de Willi Webber ponen sobre la espada y la pared al equipo, que podría aceptar con gusto los dólares venezolanos de Maldonado. Al otro lado, Barrichello cumple en pista y aporta experiencia convirtiéndose en insustituible.

¿Qué dice la bola de cristal? Se arreglarán ambas situaciones. Lo mejor para Nico es quedarse y no se ven muchos sitios dónde ir, aunque sea no ganando tanto dinero como pretende su agente. Los contactos de Petrov ya están empezando a fluir en forma de logos en el R30.


LA 'BAN TEST' GENERATION
Sauber, después del extraño caso Heidfeld, ha confirmado a Checo Pérez como compañero de Kamui Kobayashi. Pareja joven e imponente. Lo mismo hubiéramos dicho hace un año de la dupla de Toro Rosso. Sin embargo, su desempeño este año no está siendo excelente y sólo la escasa competencia de los más jóvenes (Vergne y Ricciardo siguen verdes), hace que su asiento no peligre.

Mi bola de cristal: Lo de Toro Rosso podría explotar en cualquier momento y llevarse a los pilotos por delante.


¿Y LOS NOVATOS?
Lotus parece que continuará con su experimentada pareja, aunque está por ver si sus acuerdos con Renault y Red Bull podrían afectar a este asunto. Timo Glock seguirá liderando el proyecto de Virgin, aunque todavía no sabe quién será su compañero de equipo. En Hispania sigue sobrevolando la sombra de De la Rosa, el único candidato serio a un par de asientos que seguramente se otorguen al mejor postor.

¿Qué dice la bola de cristal? No habrá cambios en Lotus y confió en que Di Grassi seguirá en Virgin si no aparece ningún adinerado pay driver. Hispania, en si misma, es una incógnita. Eso sí, Yamamoto acabará corriendo en algún lado a mitad de temporada.

lunes, 11 de octubre de 2010

Permitidme ser sincero...

Éste es un post distinto. Un post en un blog para hablar del mismo blog. Por casualidad, me he dado cuenta de que ayer se cumplieron cuatro años del inicio de esta aventura. Todo comenzó en Suzuka con un motor que dijo basta, una alegría -seamos sinceros- y un gran paso para que el tipo que ha cambiado la forma de ver la Fórmula Uno en su país se hiciera con el segundo campeonato del mundo.

Jamás pensé que esto llegaría tan lejos. Ahí seguís los fieles, los que compartimos aventura desde mucho antes de que ese piloto que ahora lleva un Ferrari ganara un Gran Premio. Además, en todo este tiempo he conocido gente a la que cuatro años atrás idolatraba y otros muchos a los que no olvidaré jamás. No voy a decir nombres, pero se me vienen a la cabeza varios. Estoy muy orgulloso de ello y para ser sinceros, contento de que este hobby vaya cada día pareciéndose más a una profesión que me encanta hacer.

Los números no engañan... las visitas del blog son menores que las que mi nueva casa tiene en un mísero minuto del día, pero me niego a que 'F1 On Board' muera. Son muchos años, muchas historias vividas, contadas y muchas horas de pasión compartida con todos vosotros, asi que voy a pensar cómo puedo revivirlo. De momento, lo único que se me ocurre es daros otro inmenso 'gracias' a todos los que estais ahí.

¡Gracias por existir, Kamui!


No está entre los cinco hombres que se jugarán el campeonato del mundo de Fórmula Uno en las próximas tres carreras y es más que probable que jamás tenga el privilegio de tener un monoplaza que le permita estar en la lucha por la gloria que supone ganar el Mundial.

Sin embargo, tras la lucha entre los cinco magníficos, alguien brilló en Japón mucho más que cualquiera de sus compañeros de profesión: Kamui Kobayashi. En la vuelta 43, el japonés era 12º. Tan sólo 16 minutos más tarde, Kamui cruzaba la línea en séptima posición.