sábado, 25 de abril de 2009

Primeras muestras de debilidad

Con la llegada de las mejoras al resto de equipos, parece que el impresionante rendimiento de los Brawn GP ha dejado de ser tal. Las diferencias entre el equipo británico y el resto se comienzan a estrechar y el monoplaza ya no parece ir sobre railes en manos de Jenson Button, como parecía en anteriores carreras. Dicho esto, el nivel de Brawn GP apenas tiene parangón entre sus rivales, asi que no es descabellado pensar en que el brillante piloto inglés se haga mañana con su tercera victoria del año.

Lo que es seguro es que, poco a poco, el orden entre los equipos está volviendo a su cauce. Hoy, tanto Ferrari como McLaren han metido sus coches en la ronda definitiva e incluso Lewis Hamilton ha parecido estar en liza por la pole en algunos momentos. Que Nelsinho haya conseguido pasar la primera fase de clasificación, es señal de que Renault también está en plena escalada.

La excepción es BMW, que sigue sin conseguir buenos resultados en calificación. Quizá sea resultado de la utilización del KERS, que según se comenta es un lastre enorme a una vuelta, aunque no se debería señalar al 'invento' que la FOTA quiere prohibir para 2010 (o eso dice nuestro agente doble preferido) ya que Kubica tampoco ha rendido como se esperaba en carreras anteriores.

Del resto, señalar la mala fortuna de Mark Webber, que se ha quedado fuera al verse bloqueado por Adrian Sutil en su vuelta rápida en la Q1. Jamás he entendido por qué los equipos se dejan los deberes para el último momento. Supone un riesgo que ya se ha constatado en fracaso en más de una ocasión.

Por cierto, el rendimiento de Sebastien Bourdais en Toro Rosso se merece otro artículo como el de Piquet del pasado lunes. Con Buemi al otro lado del box, no hay escusas que valgan con el de Le Mans.

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