Permítanme una sutil reflexión antes de que la acción del Gran Premio de Baréin nos atropelle. Como bien saben, Pirelli anunció los compuestos para la carrera hace dos meses pero hace un par de días, la marca italiana confirmó -intentando no alzar mucho la voz- que en lugar del compuesto blando sería el medio el que acompañara al duro en Sakhir, una decisión que, si bien no decidirá la carrera del domingo, ha despertado numerosas críticas entre aficionados al Gran Circo.
Vaya por delante que quizá Pirelli haya hecho lo correcto después de lo visto en China. Personalmente, creo que si la norma de usar obligatoriamente los dos compuestos en carrera supone un lastre para los equipos es que la elección de los mismos ha sido incorrecta. Así lo fue en Shanghái, donde la gran mayoría de pilotos hubieran preferido hacer una carrera enteramente con neumáticos duros. Poner blandos era un obstáculo, no un beneficio. Con los datos en la mano, es posible justificar que esa circunstancia hubiera tenido visos de repetirse en Baréin por lo que cambiar la elección de compuestos será positivo para el espectáculo.
Sin embargo, esta versión va en contra de lo que afirma Pirelli, que asegura que la decisión fue tomada antes del Gran Premio de Malasia. Según el suministrador de neumáticos, las presiones de Red Bull y Mercedes, incluidas unas estúpidas acusaciones sobre la filtración de datos por parte de los pilotos de desarrollo de la marca italiana a Ferrari, no han tenido nada que ver en la decisión. En Pirelli dicen que sabían desde hace un mes que en Baréin tendríamos medio y duro.
Entonces, las preguntas nos asaltan... ¿por qué no se anunció antes? ¿por qué Paul Hembery no desveló el cambio en ninguna de las múltiples preguntas sobre el tema que se le han hecho durante estas semanas? Seguro que estas cuestiones tienen una respuesta convincente por parte de los chicos de Paul aunque hay algo que no podrán rebatir: la comunicación del cambio ha sido un auténtico desastre. Por la salud del deporte y por su propio bien, no debe bastar que Pirelli sea honesto, también tiene que parecerlo.
Sin embargo, esta versión va en contra de lo que afirma Pirelli, que asegura que la decisión fue tomada antes del Gran Premio de Malasia. Según el suministrador de neumáticos, las presiones de Red Bull y Mercedes, incluidas unas estúpidas acusaciones sobre la filtración de datos por parte de los pilotos de desarrollo de la marca italiana a Ferrari, no han tenido nada que ver en la decisión. En Pirelli dicen que sabían desde hace un mes que en Baréin tendríamos medio y duro.
Entonces, las preguntas nos asaltan... ¿por qué no se anunció antes? ¿por qué Paul Hembery no desveló el cambio en ninguna de las múltiples preguntas sobre el tema que se le han hecho durante estas semanas? Seguro que estas cuestiones tienen una respuesta convincente por parte de los chicos de Paul aunque hay algo que no podrán rebatir: la comunicación del cambio ha sido un auténtico desastre. Por la salud del deporte y por su propio bien, no debe bastar que Pirelli sea honesto, también tiene que parecerlo.
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