miércoles, 9 de enero de 2008

Grandes de la Historia (I): 'Podía comermelos a todos'


Existen muy pocas entrevistas grabadas con Jim Clark. En los años 60, la cobertura televisiva de la F1 era prácticamente inexistente y los periodistas que asistían a las carreras les interesaba más el panorama general que lo que ahora se venera como 'la cita'. Sin embargo, a final de 1963, Clark se sentó con dos de sus amigos más intimos: Ian Scott Watson (un compatriota escocés, granjero y mentor de Clark) y Graham Gauld, un periodista del motor con quien Clark estaba escribiendo su autobiografía, 'Jim Clark at the wheel'. Gauld puso en marcha su grabadora de carrete.



Graham Gauld: Acabas de hacerte con el título mundial en Monza, pero hubo un momento en esa carrera -después del abandono del Ferrari de John Surtees- en el que pareciste relajarte y perder terreno frente al grupo que iba detrás de tí...

Jim Clark: No me relajé [lo que subraya la falta de velocidad del Lotus]. La aspiración de Surtees tiraba de mí unas 500 revoluciones más de lo que podía obtener por mí mismo. ¡Sabía que sin ayuda ni siquiera podría competir con Graham [Hill]! Me di cuenta de que no disponía de margen suficiente para poder mantener ese liderato sin forzar el coche y a mi mismo durante toda la carrera: era mejor esperar a que me alcanzaran. Cuando lo hicieron, de pronto comprendí que llevaban una pelea más fuerte entre ellos de la que yo había tenido con Surtees. Fue díficil seguir su ritmo... durante un rato. Luego volví a coger el ritmo y todo fue bien.

GG: ¡Después de la carrera hubo acusaciones de que Ferrari montaba un motor de mayor cilindrada [en todas las epocas hay polémicas]!

JC: ¿Quién puede decir que Ferrari no usó un motor de 2 litros en carrera [el límite, por entonces, era de 1,5 litros]? Dicen que nosotros montamos motores sobredimensionados, pero eso es absurdo. Nuestros motores vienen de la fábrica de Coventry Climax. No fabricamos nuestros propios motores. Me parece que nuestra falta de velocidad quedó patente en Monza, donde incluso Innes Ireland [con el BRP-BRM, Ireland que nunca perdonó que Clark le robara el volante en Lotus, le hizo de tapón en Monza. ¡Clark 'fintó' a Ireland dejando pasar a Dan Gurney a la cabeza y siguiendo su estela!] era unos seis u ocho kilómetros por hora más rápido que yo. La gente se pregunta por qué gano carreras [Clark comienza a mostrarse algo irritado]. No sé si alguien me vió en la Curva Norte de Monza [que en sus tiempos se tomaba a 270 km/h] en carrera pero, en esa curva, podía comermelos a todos.

Ian Scott Watson: Pero también ganaste en Reims, el otro gran circuito de rebufos. Tu rendimiento aquel día no debía estar nada mal.

JC: Aquello fue determinación pura. Creo que lo hize bien porque lo planeé antes de la carrera. Curiosamente, en las curvas rápidas el coche respondía mejor que nunca: podía lanzarlo en una gran deriva y sencillamente clavar el pie en el gas. Tomaba curvas a una velocidad que jamás habría creido posible. Lo observé en los entrenamientos, pero para la carrera sabía que Graham dispondría del nuevo monocasco BRM y sería muy rápido. Tenía pensado ir a fondo en la primera vuelta de modo que, cuando hubieramos pasado por las curvas rápidas, pudiera tomarme un descanso. Antes de la carrera, le dije a Colin lo que iba a hacer pero también que, si no lo lograba en cinco vueltas, me lo tomaría con calma y vería que pasaba.

Pasó la primera vuelta y seguí adelante; sin forzar el coche. Me limité a concentrarme en las frenadas y en las curvas, para nada quería forzar el motor. Al final de la carrera, el chivato seguía en 9.600 rpm y se nos permiten 9.800 rpm. O sea que ni siquiera había exprimido el motor en el ataque inicial.

GG: Te acabas de convertir, a los 27 años, en el campeón mundial más joven de la historia. ¿Crees que a partir de ahora la tendencia serán cada vez pilotos más jovenes?

JC: Bueno, ahí está Chris Amon [por entonces, con 20 años], que es muy bueno, aunque, por lo que dicen algunas fuentes, no tiene mucho nervio. Lo que siempre he creido es que, si hubiera podido empezar con 17 años, lo habría hecho entonces. Me parece que he mejorado muchísimo mi experiencia, pero si lo hubiera hecho antes, todo habría seguido el mismo camino.

GG: Parece que te encanta pilotar una amplia variedad de coches: turismos, sports, monoplazas, Indycars, cuatro ruedas motrices, americanos de gran cilindrada, etcétera. ¿Es algo que necesitas hacer para ganarte la vida o realmente es porque quieres hacerlo?

JC: Me encanta la variedad porque me metí en el automovilismo por curiosidad. Quería saber cómo sería pilotar un coche al límite o en una carrera. Esto era cuando iba al colegio o cuando Ian [Scott Watson] corría y yo estaba en boxes. Vaya, me preguntaba cómo sería. Y conservo ese mismo tipo de curiosidad. No paro de pensar: "¿Cómo sería pilotar un coche de esos?" o "¿cómo sería correr ahí?". Y así una y otra vez, asi que, cuando tengo la oportunidad, no dudo. En cierto modo, siempre me lanzo a la piscina.

ISW: ¿Hasta qué extremo lo llevas? Te encanta volar, cómo no, pero ¿Qué vendrá luego? ¿Regatas?

JC: [Ríe] No, no me gusta hacer regatas. Son muy largas y seguro que me mareaba. Pero tantas posibilidades no son lo que quería sacar del automovilismo, sino el resultado de estar ahí. A veces, puede resultar demasiada atención. Por ejemplo, anoche quería ver a John Whitmore [piloto de turismos y íntimo de Clark] en Shetterton. Sabía que estaba en la carpa de Molyslip, en una fiesta privada. Yo no estaba invitado pero no me importó, me traia sin cuidado. Pues bien, le dije al tipo de la puerta que quería ver a John y me soltó: "No, no puede entrar, no puede entrar". Veía a John, asi que le dije: "Mire, está allí: ¿podría avisarle, por favor?". Entonces me vieron unas cuantas personas, que empezaron a decirme: "¡Entra, entra!". Pero respondí: "No gracias. No estoy invitado". Insistieron.. pero la verdad es que ¡si lo hubieran querido me habrían invitado como es debido! Ahora querían que entrara sólo porque estaba ahí. ¡En ese momento estaba seguro de que no entraría en esa carpa!

ISW: Hablemos un poco de tu pasado. Cuéntanos algo del lugar donde naciste.

JC: Berwickshire no es un condado de montaña, como mucha gente podría pensar. Es llano, una parte del país muy cultivable y fértil. Hay 14 o 15 trabajadores en mi granja, así que no soy el hombre solitario en la colina que algunos podrían pensar. El pastoreo me dio una buena formación en la agricultura. Al fin y al cabo, mi padre tenía razón, aprendí más en la granja de lo que habría aprendido en la escuela.

GG: Pero menudo contraste: agricultura y automovilismo.

JC: La verdad es que eso me ayuda a mantener el equilibrio. El automovilismo te deja bastante hecho polvo. Por ejemplo, pierdo bastante pso en algunas carreras, dependiendo del calor que haga y de lo dura que haya sido la carrera. En mayo, disputé cuatro carreras en ocho días: Mónaco, EEUU, Canadá e Inglaterra y perdí más de seis kilos en esos ocho días. Fue magnífico regresar a casa a recargar las pilas.

GG: Pareces estar muy en forma. ¿Entrenas duro?

JC: Aunque parezca estraño, no entreno nada, sólo que no bebo mucho y no fumo. Sólo bebo en compañía. Es que siempre estoy haciendo algo: correr, claro está, viajar y luego cualquier otra cosa qu surja. Por ejemplo, esquí acuático, en Sudáfrica. En la escuela hacía atletismo, era velocista. Cuando estoy en casa, me gusta también jugar al criquet en lugar de ir a ver algun deporte. Prefiero tomar parte en algo en lugar de ver a otros.

GG: ¿Y cómo te sientes ahora que has ganado el título? ¿Una gran satisfación, verdad?

JC: En algunos aspectos, no. Supongo que si uno se hubiera marcado desde un principio llegar a ser piloto de F1, y hubiera hecho de ello la ambición de su vida, la sensación de haber tenido éxito sería mayor. Pero, en cierto modo, siempre luché más contra ello que por ello. No quería pasar más que algún que otro fin de semana fuera de casa y llegó un momento en que mi padre me preguntaba qué sacaba del deporte, porque era una afición muy cara y yo le decía que podía hacer que esa afición fuera rentable. ¡Y así empezó todo! Sólo quería competir.

GG: ¿Qué tiene la F1? ¿Qué es lo más importante, el hombre o la máquina?

JC: Ninguno de los dos. Para mí, es la satisfación de pilotar un coche a lo que considero el límite, el mio y el de la máquina. Esa yo creo que la mayor sensación que me deja la F1.

GG: ¿Y qué hay del factor peligro? ¿Cómo lo concilias con los alicientres del deporte y con el arte del pilotaje?

JC: Simpre está ahí, subconscientemente. Todos somos conscientes de los peligros de las carrieras. No hay héroes. Hay viejos y hay valientes, pero ¡no hay viejos y valientes! Eso es un hecho.

Requiere valor, sí: pero también seguridad en ti mismo y en tu máquina. Si me preguntaas ahora por la velocidad con la que paso un tramo estrecho del Nürburgring, por ejemplo, probablemente haga un cálculo conservador. Es mejor preparar el terreno y hallar el límite poco a poco que superarlo y asustarse. Esos siempre te hará levantar el pie.

GG: ¿Cuál es la clave para pilotar rápido y hacerlo bien?

JC: Creo que lo más importante en el automovilismo es la concentración. A menudo, si quiero ir más rápido, no corro más, simplemente me concentro más. Me concentro en la frenada, en la trayectoria, en el acelerador, en cuánta potencia puedo aplicar. Me concentro en todo.


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2 comentarios:

Anónimo dijo...

Grande Jim Clark. Ya habia leido por ahí esta historia alguna vez. Qué lastima no haber vivido su época...

un saludo desde Argentina.. a ver si escribe algo del Chueco pronto!

I. dijo...

Me apunto la idea. El próximo 'Grande de la Historia' será de Gilles Villeneuve, será algo distinto a los anteriores (ya fastidie la sorpresa..). Espero que os guste. Saldrá la semana que viene, en cuanto lo acabe..

salu2!