lunes, 30 de noviembre de 2009

Análisis 09: Los equipos

Para terminar el Análisis de la temporada 2009, repasaremos la alineación de equipos. El año ha sido muy productivo en noticias y prácticamente nada está igual que como lo planteamos al inicio de temporada. Además, echaremos un vistazo al futuro. ¿Cómo se presenta 2010 para los equipos?

El 'milagro Brawn' (ganar los dos títulos a la primera con un equipo desahuciado un mes antes de comenzar la competición) será recordado durante la historia del deporte y es fruto de grandes decisiones, que comienzan con un inteligente acuerdo motorista con Mercedes y terminan con la compra por parte del gigante alemán, tan sólo nueve meses más tarde.

En lo deportivo, mantener a Rubens en lugar de contratar a Bruno Senna fue un acierto. La oportunidad era tan jugosa como descentrarse perdiendo puntos por novatadas y aunque los tejemanejes estratégicos para favorecer a Button en la carrera por el mundial son éticamente reprochables, la historia dice que decidirse por un piloto es la mejor manera de acabar llevándote el trofeo a casa.

El futuro de la escuderia tras la compra por parte de Mercedes es grandioso, aunque será interesante ver cuán bueno ha sido el trabajo de la gente de Brackley con los pocos recursos para el desarrollo que han tenido en 2009. Rosberg, pese a algunas dudas, debería ser fantástico y la impresión es que el equipo elegirá a Heidfeld para acompañarle. Otro piloto de perfil Rubens.

Menos cambios habrá en Red Bull Racing. Adrian Newey demostró la pasada temporada que sigue estando en buena forma y los pilotos estuvieron a la altura de los mejores. Tan sólo la maltrecha fiabilidad, parte debida a los motores Renault, queda en el debe de los subcampeones del pasado año.


Todo hace pensar que la tentativa 2010 de Red Bull por el título será aún más fuerte. La estabilidad en la marca de la bebida energética es la nota predominante, mientras que todos sus rivales se han dedicado a jugar con los sillas del mercado de pilotos, en Red Bull se han preparado para lo que debería ser una sensacional temporada.

El 2009 de McLaren fue un ejemplo de capacidad de reacción y poder. Sin duda, el británico fue el equipo que más invirtió en borrar de la memoria colectiva su triste inicio de temporada y terminó siendo el más fuerte de todos en el último tercio del año. Buen presagio para el futuro.

Arrebatar a Jenson Button a Ross Brawn ha sido un buen golpe, aunque no quita la espina clavada de haber regalado los mejores motores al equipo campeón del año pasado. El campeón del mundo debería convertirse en un buen escudero del endiabladamente rápido Lewis Hamilton, que será de nuevo el jefe del corral en Woking.

Ferrari demostró en 2009 que ya no es aquel equipo que maravillaba en la era Todt, a pesar de que Kimi hizo buenas cosas en la segunda mitad. La forma de gestionar la sustitución de Felipe Massa es un tremendo ejemplo de incoherencia: primero, traemos a la lesionada leyenda de vuelta, luego al yayo entumecido y lento para terminar pagando a golpe de talonario a otro equipo por un piloto que difícilmente iba a adaptarse en dos meses.

Sin embargo, 2010 supondrá el inicio de un nuevo proyecto en Maranello. Räikkönen está fuera, demostrando lo implicado que está Ferrari en la contención de gastos, y Fernando Alonso traerá un necesario soplo de aire fresco a la Scuderia acompañando a Felipe Massa al volante de los coches rossos.

El inicio no será sencillo. El F60 era un coche muy complicado y habrá que valorar si Felipe puede volver a su mejor nivel de entrada. Sin embargo, Ferrari se dedicó a preparar esta temporada desde que comprendió lo poco que podía hacer en la pasada, asi que el monoplaza debería ser rápido de salida. Si es así, Fernando hará el resto.

Como miembro del 'diffuser gang', Toyota fue fuerte al inicio de año, donde cimentó su buena posición en la clasificación, aunque debió haber ganado algún Gran Premio en las primeras fechas. No lo hizo y el resto es historia: el vaso de la paciencia se ha colmado en Japón y el equipo de Colonia no estará en la parrilla de cara al próximo año.


Otro gigante que no estará en Bahrein será BMW, para quien los resultados de 2009 debieron ser algo más que un simple tropezón en su impoluto camino hacia la supremacía en el Gran Cico. Ahora podemos estar seguros: cortar el grifo del desarrollo cuando Robert Kubica aspiraba al campeonato hace dos temporadas fue un enorme error.

En el camino se quedan las ilusiones de la gente de Hinwil, que debería encontrar un hueco en parrilla tras ser vendido a su viejo patrón Peter Sauber, después de que el acuerdo con Qadbak se viniera abajo demasiado tarde. Ojalá así sea.

El último equipo que tenía la ventaja del doble difusor fue Williams. Por ello, es complicado de entender cómo es posible que los de Grove no hayan pisado el cajón en toda la temporada. Olvidando el desastroso nivel de Kazuki Nakajima, Rosberg hizo un gran año, aunque siempre se quedó a las puertas de la gloria.

Después de todo, seguir en competición es una buena noticia para Williams, visto el panorama de deserciones y el panorama de la vuelta de los equipos privados debería favorecer al más privado de los mismos. Hülkenberg será una bala desde que se suba al monoplaza y Rubens hará un buen trabajo según el equipo. Sin duda, Williams tuvo mejores carta en su mano, pero se decidió por el veterano brasileño. Lo mismo pasó con la elección de motores.

El equipo Renault también rindió por debajo de lo esperado en Australia. El clásico 'no somos suficiente rápidos' se convirtió en evangelio en boca del siempre sobresaliente Fernando Alonso. Al otro lado del box, tanto el lento Nelsinho Piquet como el fogoso Romain Grosjean no aportaron absolutamente nada más que horas de reparación para los mecánicos.

A pesar de haberse sobrepuesto de la mejor manera posible del 'crashgate' nombrando una nueva cúpula directiva y asegurándose un excelente piloto como Robert Kubica, las cosas no pintan demasiado bien en Renault. Su futuro en la Fórmula Uno sigue en entredicho y bueno, en Enstone ya saben lo dura que es la vida sin Alonso.


La revelación de la temporada ha sido el equipo Force India. Con una buena dupla de pilotos, Vijay Mallya se aseguró un suculento contrato de colaboración con Mercedes, que le ha reportado -y le reportará- grandes beneficios al pujante equipo de Silverstone, que abrió la lata de podios subiéndose al segundo puesto en Spa.

Asumida la marcha de Fisichella a Ferrari, el equipo dio la alternativa al díscolo Tonio Liuzzi, que pareció estar mucho más centrado que en su etapa Toro Rosso. En el otro asiento, Sutil sigue mejorando carrera a carrera y seguramente esté ya listo para afrontar cotas mayores. Ser único equipo estable junto a los dos de Red Bull también favorecerá a que Force India esté más arriba en 2010.

La emancipación de Toro Rosso de su casa madre está siendo muy complicada para el equipo de Faenza, que sufrió mucho para encontrar el ritmo en cuanto el resto apretó el acelerador del desarrollo. Sin ir más lejos, presentarse en Hungría con dos pilotos que acumulaban diez carreras entre ambos parece una auténtica locura para un modesto.

Pero los pilotos no deberían ser un gran problema en 2010, ya que la principal preocupación será volver a fabricar sus propios chasis en Faenza. Contemplar la posibilidad de que alguno de los nuevos le supere de inicio, puede ser el golpe de gracia para un equipo que es mucho más inestable de lo que parece.

De los cuatro equipos debutantes estarán en Bahrein, nuestro Campos Meta parece el más avanzado. Bruno Senna, aparte de buen piloto, es un plus para los patrocinadores y parece que el aspecto técnico, liderado por Toni Cuquerella, será de primera. Por su parte, el solvente Timo Glock será la punta de lanza del proyecto de Manor GP en Fórmula Uno, cuya particularidad es que su monoplaza se desarrollará mediante CFD.

Poco más que buenas palabras son las que nos llegan desde Charlotte, sede de USF1, que parece haberse asegurado la contratación del esforzado 'Pechito' López, a pesar de las dudas que su proyecto está generando en el paddock. El último en discordia es el renovado equipo Lotus. Con capital malayo y Mike Gascoyne al frente, podría tener tan avanzado el diseño del chasis como el fichaje del incombustible Jarno Trulli.

1 comentario:

J. Arce dijo...

Hace años hice una reflexión: Ferrari y el Barcelona de fútbol eran clavaditos, es decir, un par de prostíbulos sin orden ni concierto, acostumbrados a perder, cuyas poco habituales victorias hacían disfrutar enormemente a sus seguidores. Curiosamente en El País publicaron un reportaje con las mismas conclusiones.
Hoy en día Ferrari se parece más al Real Madrid: un dinosaurio hecho a base de talonario. En mitad de estas dos épocas hemos sufrido a Jean Todt.